Responsabilidad
Contemplamos el principio de responsabilidad confiando en nuestra capacidad de poner en marcha las iniciativas suficientes para beneficiar a nuestros usuarios y no causarles daño alguno.
La responsabilidad se concreta en acciones, en medidas responsables que son más que palabras.
Buscamos garantizar la integridad de cada usuario mediante estos doce principios. Los damos a conocer públicamente entendiendo el compromiso responsable que adquirimos con este acto.
Nos comprometemos a someter las decisiones cruciales a una supervisión psicológica profesional sin revelar la identidad del usuario, especialmente en los casos en los que necesitemos un respaldo técnico y profesional.
Buscamos fomentar la autonomía y la independencia del usuario
Planteamos limitaciones en las problemáticas que podemos abordar sin apoyo psiquiátrico. Así como también tenemos consciencia de que no todos los trastornos pueden utilizar una modalidad de atención en línea.
Concretamos iniciativas informativas y de derivación adecuadas y responsables para aquellos colectivos vulnerables a los cuales no podemos ofrecerles suficientes garantías o medios.
Estamos alertas a las situaciones que requieren atención inmediata y urgente, entendiendo que la atención presencial o el ingreso clínico son opciones más adecuada para esos casos que la atención en línea.
Nos aseguramos de no vulnerar la autorización paterna para atender a menores de edad.
Si no podemos atender a unas necesidades concretas, verbalizamos nuestra limitación y dejamos que el usuario escoja libremente.
Buscamos fomentar la autonomía y la independencia del usuario a través de nuestras intervenciones psicológicas.
Las decisiones que tomamos como psicólogos responsables pretenden adaptarse a situaciones concretas y ofertar alternativas específicas para cada caso.